Por: Diego Silva Silva
No me extrañó en lo
absoluto la visita del doctor Abreu a Miraflores, su lobby se mueve rápido y la
alta jerarquía política no le niega ni los recursos, ni las visitas, ni la
sonrisa.
Eso lo sabemos desde
siempre, así mismo lo recibieron los otros presidentes de la IV República y
hasta el mismísimo Chávez (aunque en un comienzo, el comandante tenías serias
reservas con el personaje y sus proyectos, me consta...pero triunfó el lobby
asociado al poder).
Claro, la visita se
debe a que el libro de Geoffrey Baker está generando reflexiones: aun cuando no
tenga la razón en la totalidad de sus afirmaciones, se ha demostrado que él
único preocupado por los desaguisados del sistema no es solamente él (Libro crítico
sobre Abreu (USA): debates en Londres; abusos e irregularidades ¿y aquí? ¿se
censurará la crítica?). Estábamos seguros de que en esta
oportunidad, el doctor acudiría a usted, temeroso de que la onda reflexiva que
desmitifica su proyecto, le pueda alcanzar.
Hace tiempo publiqué
las críticas hechas por otro investigador, un estadounidense preocupado por la
cultura de las minorías y sobre todo de los afro-americanos; llegando inclusive
a sugerir que podría considerarse una imposición neo-colonial, que no se pudo
lograr ni durante la esclavitud, ni durante los años de cruel racismo (hasta la
muerte de Martin Luther King).
Recibo comunicaciones
de colegas americanos preocupados porque el gobierno de Venezuela se convierte,
con este proyecto internacional, en un agente de la neocolonización, al darle
primacía a un proyecto que se centra en la repetición de los valores de las
culturas hegemónicas: los hábitos musicales son aprendidos por una práctica
constante en la escucha y ejecución, práctica que podría comenzar muy temprano
en la infancia. El conocimiento objetivo y el entendimiento conceptual no nos
provee automáticamente de percepciones instintivas y respuestas con las cuales
se capacitará al escucha para entender los rápidos, sutiles y cambiantes cursos
del flujo musical.
Entender la música no
es un asunto de definiciones, de diccionarios, de conocer esta, aquella o
cualquier regla de la sintáctica y la gramática musical, más que eso, es un
asunto de hábitos correctamente adquiridos en el mundo particular de cada
quien, y aquí es determinante la asociación simbólica y semiótica de la música,
lo que ella representa.
¿De cual inclusión
social hablámos?...por favor.
Recuerda usted cuando
el doctor apareció abrazado con Juanes y Bosé, después que los dos personajes
ofendieron a los venezolanos y uno de ellos llamó hijo de p... al presidente de
la República (Chávez) (El problema NO
son los Bosé y los Juanes solamente… respuesta a Sant Roz); en ese
momento, se manifestó una ola de indignación, y como siempre, el lobby del
doctor en la altas esferas logró convertir una afrenta y una asociación poco
honrosa (con los dos personajes), en una acción diplomática... que reseñé de
este modo:
El Jueves 25 de enero,
nos llevamos la gran sorpresa de que el Doctor Abreu había visitado el Centro
de la Diversidad Cultural?se hizo fotografiar con la autoridad mayor de la
cofradía de los Diablos Danzantes (recientemente declarados Patrimonio Intangible
de la Humanidad) e hizo declaraciones sobre lo que él, desde su pedestal
eurocentrista, cree que es la música indígena. Pobres diablos (de Yare), tan
cercas de Abreu (ayer)?
Se hizo escoltar con un
selecto grupo de niños, a quienes les pontificó sobre la importancia de revisar
y estudiar nuestras raíces.
¿A quién va a engañar
el doctor con esta salida torpe y de mal gusto?
Presidente, cuando
usted llegó a la primera magistratura escribí un artículo felicitándole y
deseándole éxito y sabiduría (La Paz gracias a
Abreu&orquestas; derrota de las comunas, crisis cultural),
le expresé que usted debería recibir a quienes tenemos cuestionamientos y
críticas fundamentadas, científicas, ampliamente documentadas y debatidas a
nivel internacional, relacionadas con la música en los primeros años de la
vida, de la infancia, cuando se desarrollan los sistemas jerárquicos y códigos
de percepción para siempre.
Haga usted un ejercicio
de democracia participativa o INCLUSIÓN, muy de moda ahora por el asunto de los
Chino y Nacho, e invitenos a Miraflores a conversar con usted para que escuche
puntos de vista diferentes...Usted y el gobierno no podrán jamás decir o
afirmar que el proyecto de Abreu fortalece a los pueblos americanos en su afán
por descolonizarse, mucho menos decir que esas orquestas llevan la CULTURA
MUSICAL VENEZOLANA por el mundo...tampoco podrán negar que hoy por hoy
constituye UN MONOPOLIO.
El reconocido hecho de
que hay muchos sistemas estilísticos diferentes, tanto en diferentes culturas
como dentro de una sola cultura, demuestra que los estilos son construidos por
los músicos en un momento y lugar particular, y que ellos no están basados en
base a relaciones naturales o universales inherentes al material musical en sí
mismo. Y si la experiencia de la música no está basada en torno a respuestas
naturales y universales, esta debe estar basada en respuestas las cuales son
adquiridas a través del aprendizaje.
Dígame usted
Presidente, ¿Qué se aprende paradigmáticamente en el sistema de orquestas?
salud!!!
Nota: este artículo fue
publicado originalmente en el portal Aporrea el miércoles 26/11/2014
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