Por: Freddy Argimiro Gutiérrez
Aporrea lo publicó: Jesse Chacón y Temir Porras son nuevos
directivos en el Sistema de Orquestas.
Ya la noticia está corriendo por las redes sociales.
¿Qué buscan Abreu y el gobierno con esta maniobra? Pues intentar
disolver el fuerte debate que se ha generado con respecto al Sistema Nacional
de Orquestas, debate que tomó un segundo aire luego de las desafortunadas
declaraciones que el mal llamado maestro dio cuando recibió a Juanes y a Bosé.
La idea del chavismo oficial en este momento es hacerle creer a
los ingenuos que Jesse Chacón y Temir Porras van a vigilar a Abreu y van a
darle un giro conceptual al Sistema Nacional de Orquestas.
Eso no va a ocurrir y es vital que desmontemos inmediatamente la
sutil trampa que nos han montado.
Jesse Chacón suele escribir en una conocida red social frases de
apoyo para José Antonio Abreu y nunca se ha pronunciado con respecto a las críticas
que diversos sectores del ámbito cultural le han hecho al Sistema Nacional de
Orquestas.
Temir Porras es un funcionario que se ha aprovechado de su cargo
en la cancillería para tenderle puentes en el exterior a José Antonio Abreu.
Podríamos decir que Temir es un agente trasnacional de Abreu que se disfraza de
“servidor público”.
Por otra parte es bueno recordar lo que comentaron por debajo de
cuerda algunos funcionarios del Ministerio del Poder Popular para la Cultura
cuando el sistema de Abreu fue asumido por la Vicepresidencia de la República: “Se
fregó Abreu, ahora Chávez lo va a vigilar directamente”… “Nos salvamos, los
recursos del ministerio han quedado fuera del alcance de Abreu”…
Lo cierto es que los privilegios políticos y económicos de Abreu
aumentaron y el debate se enfrió por un buen rato. Nos marearon. La pregunta es
¿vamos a volver a caer en la misma trampa?
Para que se den cuenta de lo “bueno” que es
Abreu en materia de manipulación, lean este testimonio de Emilio Mendoza
referido a la creación de la Orquesta De Instrumentos Latinoamericanos (ODILA):
“La compositora y etnomusicóloga Isabel Aretz en
conjunto con el director de orquesta y magnate de la cultura musical sinfónica
José Antonio Abreu, idean dicha orquesta en 1982 como un proyecto para las
celebraciones del bicentenario del natalicio de Simón Bolívar en 1983.”
“La formación de una orquesta de instrumentos
latinoamericanos por parte de Abreu era incongruente con el movimiento de la
orquesta juvenil clásica, aunque se adapta a la tendencia de este personaje de
abordar y monopolizar progresivamente todos los aspectos del ambiente musical
venezolano. Se puede especular que el simbolismo nacionalista de los
instrumentos venezolanos y latinoamericanos era una atracción efectista para el
propósito patriótico que se tenía en mente, es decir la celebración del
bicentenario del natalicio de Simón Bolívar, con un concierto oficial
impactante de una orquesta nueva y latinoamericana de jóvenes, en el Día de la
Juventud, el 12-02-1983. Se mantiene esta suposición por la visión
retrospectiva del desarrollo del sistema de orquestas juveniles en el país
después de veinticinco años, en el cual no se volvió a contemplar a los
instrumentos étnicos de nuevo después del proyecto bicentenario de la ODILA.
Además, después de cumplido el concierto bicentenario, la supervivencia del
proyecto ODILA más allá de esa función quedó en manos de su director Mendoza
sin ningún otro interés por parte de Aretz ni Abreu, y al contrario como se verá
más adelante, entorpecieron su desarrollo.”
“El personal de la ODILA iba a ser constituido
por los integrantes de las orquestas juveniles, pero éstos no acudieron a las
clases ni a los ensayos… Mendoza soluciona el problema de personal con la
integración de jóvenes de los barrios cercanos al conservatorio, muchachos que
tenían ya culturalmente una atracción sin prejuicios y experiencia en música
folklórica y popular, y acudieron masivamente a los ensayos. Se daban clases
regulares de bandola llanera, arpa venezolana, tiple y tres cubano, aerófonos
latinoamericanos, percusión afrovenezolana, percusión afrocaribeñas y
latinoamericana, teoría y solfeo, composición, práctica de ensambles
tradicionales y práctica orquestal de piezas nuevas.”
“Mendoza materializa y
concluye el proyecto bicentenario con el concierto presentado el 12-02-1983 en
la Sala José Félix Ribas, Teatro Teresa Carreño, Caracas, con asistencia del
Presidente de la República, ministros, militares y demás altas personalidades
oficiales del país.”
“Mendoza continúa la ODILA más allá de este
compromiso sin el interés de Abreu ni de Aretz en la conducción del proyecto…”
“A partir de agosto de 1985, al regreso de una
gira por Canadá auspiciada por Juventudes Musicales, la actividad docente de la
ODILA en el conservatorio de la ONJV fue suspendida. Este corte fue sorpresivo
ya que antes de la gira, Abreu había expresado por boca de su segundo en mando,
Pedro Álvarez, a Mendoza la intención de establecer núcleos de orquestas
similares a la ODILA en todo el país, igual a su movimiento de orquestas
juveniles que se multiplicaban por todo el territorio. Mendoza le había
propuesto afinar primero el proyecto educativo del conservatorio con solidez,
como programa piloto, para luego llevarlo a otras ciudades. Como Abreu exigía
arrancar de inmediato la multiplicación de la ODILA, indiferentemente del
estado lamentable en que se encontraba el único ejemplar de la orquesta en
Caracas, no hubo entendimiento posible, ni oportunidad de diálogo entre Abreu y
Mendoza. Un proyecto ya en camino, el establecimiento de un centro de construcción
de instrumentos latinoamericanos en el núcleo de la orquesta juvenil de La
Rinconada, para lo cual ya se habían fabricado los prototipos, fue igualmente
eliminado.”
“La intención original de las orquestas era de
ofrecer al compositor una base instrumental de alternativa para la creación, en
vez de los instrumentos sinfónicos europeos. Al aproximarse a este
instrumental, el creador necesitaría un cambio de pensamiento y se cuestionaría
todo su conocimiento y preparación académica para afrontarlos con sinceridad y
frescura. Se daría inicio a un acercamiento serio hacia las culturas no
europeas que, con pocas excepciones, es carente en la formación actual del
compositor de conservatorio. La ideología de la ODILA no rechazaba la cultura
europea, siendo posible la mezcla al igual como el folclore mismo lo hace con
cualquier interferencia cultural. La ODILA deseaba colocar el folclore musical
e indígena latinoamericano, usualmente menospreciado en los ámbitos académicos,
como recurso indispensable para el desarrollo musical del artista que se
identificara con su entorno cultural. No como una intención nacionalista per
se, sino como una ventana de posibilidades sonoras y de pensamiento que estaba
frente a nosotros virgen, por descubrirse. Deseaba atraer un interés especial
por la música étnica latinoamericana para que se originara el desarrollo hacia
una expresión musical contemporánea surgiendo de esa cultura, además de las
otras culturas occidentales que se incluyen en nuestra formación e influencias.”
El artículo completo pueden leerlo en la Revista
Musical de Venezuela (Fundación Vicente Emilio Sojo, año 2004, Nº 44)
Jesse Chacón y Temir Porras son nuevos
directivos en el Sistema de Orquestas. Ver información completa aquí: http://www.aporrea.org/actualidad/n223787.html